miércoles, 25 de mayo de 2022

JEREMIAS 2

  • Jehová y la apostasía de Israel


JEREMIAS 2





2.1-3.5 En esta sección, la analogía del matrimonio contrasta tremendamente el amor de Dios para su pueblo con el amor de este por otros dioses y revela la infidelidad de Judá. Jeremías condena a Judá (algunas veces llama a Judá "Jerusalén", el nombre de su ciudad capital) por buscar la seguridad en cosas indignas, cambiantes y no en el inalterable Dios. Quizás nos sintamos tentados a buscar la seguridad en las posesiones, en la gente o en nuestras habilidades, pero estos nos fallarán. No existe seguridad duradera aparte de nuestro eterno Dios.

2.2 Apreciamos a un amigo que permanece fiel a su compromiso y nos desilusiona el que no puede cumplir una promesa. A Dios le complació cuando su pueblo lo obedeció al principio, pero se contrarió cuando se negaron a cumplir su compromiso. Las tentaciones nos distraen de Dios. Piense en su compromiso original de obedecer a Dios y pregúntese si sigue permaneciendo fiel.

2.3 La primicia, o la primera porción, de la cosecha se separaba para Dios (Deu 26:1-11). De esa misma forma Israel estaba dedicada a Dios en sus años anteriores: ansiaba complacer a Dios, como si fuera su joven esposa, un pueblo santo y devoto. Esto era un gran contraste con el pueblo de los tiempos de Jeremías.

2.4-8 La nación unida incluía "la casa de Israel" y "la casa de Jacob" (Judá). Jeremías conocía bien la historia de Israel. Los profetas recitaban la historia al pueblo por varias razones: (1) recordarles la fidelidad de Dios; (2) asegurarse de que el pueblo no la olvidaría (no tenían Biblias que leer); (3) enfatizar el amor de Dios hacia ellos; y (4) recordarles que hubo un tiempo en que estuvieron cerca de Dios. Debemos aprender de la historia para así construir sobre los éxitos y evitar repetir los fracasos de los demás.

2.8 Baal era el jefe masculino de los dioses de la religión cananea. "Baales" (2.23) se refiere al hecho de que, en la práctica cananea, Baal se adoraba en varios lugares. Baal era el dios de la fertilidad. Su adoración incluía sacrificio de animales, prostitución sagrada (hombres y mujeres) en los lugares altos. Jezabel, la esposa del rey Acab, inició la práctica de la adoración a Baal en el reino del norte y finalmente se difundió por todo Judá. La orientación sexual de la adoración de este ídolo era una constante tentación para los israelitas, quienes tenían el llamado a ser santos.

 JEREMIAS
La resistencia no es una cualidad común. Muchos carecen de compromisos, interés y disposición a largo plazo que son vitales para cumplir una tarea a pesar de las probabilidades. Sin embargo, Jeremías fue un profeta que resistió.
El llamado de Jeremías nos enseña cuán íntimamente Dios nos conoce. Nos evalúa antes que nadie sepa que existiremos. Nos cuida mientras estamos en el vientre de nuestra madre. Planea nuestras vidas mientras se forman nuestros cuerpos. Nos valora mucho más de lo que nos autovaloramos.
Jeremías tuvo que depender del amor de Dios para poder soportar. Por lo general, sus oyentes eran antagónicos o apáticos a sus mensajes. Lo despreciaron y a menudo lo amenazaron de muerte. Pudo presenciar tanto el entusiasmo del despertar espiritual como la tristeza por el regreso de una nación a la idolatría. A excepción del rey Josías, que fue bueno, Jeremías observó que un rey tras otro olvidaban sus advertencias y apartaban de Dios al pueblo. Vio cómo asesinaban a otros compañeros profetas. A él mismo lo persiguieron con rigor. Por último, observó la derrota de Judá a manos de los babilonios.
Jeremías respondió a todo esto con el mensaje de Dios y con lágrimas humanas. Sintió el amor directo de Dios por su pueblo y el rechazo del pueblo a ese amor. Pero aun cuando se enojaba con Dios y se sentía tentado a renunciar a todo, Jeremías supo que debía seguir adelante. Dios lo llamó para que resistiera. Expresó sentimientos profundos, pero además vio más allá, al Dios que pronto ejercería su justicia, pero que después de todo administraría su misericordia.
Quizás nos resulte fácil indentificarnos con las frustraciones y el desaliento de Jeremías, pero debemos darnos cuenta que la vida de este profeta también nos alienta a ser fieles.
Puntos fuertes y logros :
-- Escribió dos libros del Antiguo Testamento: Jeremías y Lamentaciones
-- Ministró durante los reinados de los últimos cinco reyes de Judá
-- Fue un catalizador en la gran reforma espiritual ocurrida durante el gobierno de Josías
-- Actuó como mensajero fiel de Dios, a pesar de los atentados que hubo en su contra
-- Sufrió tanto por la condición caída de Israel que ganó el título de "profeta llorón"
Lecciones de su vida :
-- La opinión de la mayoría no es necesariamente la voluntad de Dios
-- Si bien el castigo por el pecado es severo, hay esperanza en la misericordia de Dios
-- Dios no aceptará la adoración hueca e hipócrita
-- Servir a Dios no garantiza la seguridad en la tierra
Datos generales :
-- Dónde: Anatot
-- Ocupación: Profeta
-- Familiares: Padre: Hilcías
-- Contemporáneos: Josías, Joacaz, Joacim, Joaquín, Sedequías, Baruc
Versículos clave :
"Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño. Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande. No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová" (Jer 1:6-8).
La historia de Jeremías se narra en el libro de Jeremías. Además se menciona en Ezr 1:1; Dan 9:2; Mat 2:17; Mat 16:14; Mat 27:9. Véase también 2 Crónicas 34, 35 para la historia del avivamiento espiritual bajo el reinado de Josías. 


2.10 Dios decía que aun las naciones paganas como Quitim (Chipre, en el oeste) y Cedar (residencia de las tribus árabes que vivían en el desierto al este de Palestina) permanecieron leales a sus dioses nacionales. Pero Israel abandonó al único Dios verdadero por un objeto indigno de adoración.

2.13 ¿Quién apartaría un manantial de agua resplandeciente por una cisterna, un pozo que recogía agua de lluvia? Dios le dijo a los israelitas que hacían exactamente eso cuando se apartaban de El, la fuente de agua viva, para adorar a otros ídolos. No solo eso, las cisternas que escogieron estaban rotas y vacías. El pueblo construyó sistemas religiosos para almacenar la verdad, pero no tenían valor alguno. ¿Por qué nos debemos asir de las promesas quebrantadas de "cisternas" inestables (dinero, poder, sistemas religiosos o cualquier cosa pasajera que colocamos en lugar de Dios), cuando Dios nos promete refrescarnos constantemente con El mismo, fuente de agua viva (Joh 4:10)?

2.16, 17 Menfis estaba cerca de lo que hoy es El Cairo, en el bajo Egipto, y Tafnes estaba en la región nordeste del mismo país. Jeremías a lo mejor se refería a la anterior invasión de Judá por el faraón Sisac en 926 a.C. (1Ki 14:25), o quizás haya estado prediciendo la invasión del faraón Necao en 609 a.C., cuando moriría el rey Josías de Judá (2Ki 23:29-30). Jeremías quiso señalar que el pueblo se acarreó esto al rebelarse contra Dios.

2.22 La mancha del pecado es más profunda que la piel. Israel tenía manchas que no podían limpiarse, ni siquiera con los limpiadores más fuertes. La purificación espiritual debe ir hasta el corazón y este trabajo solo lo puede hacer Dios. No podemos obviar los efectos del pecado y esperar que desaparezcan. Su pecado ha originado una profunda mancha que Dios puede quitar y lo hará si usted está dispuesto a que El lo limpie (Isa 1:18; Eze 36:25).

2.23-27 El pueblo se compara a animales que buscan pareja en tiempos de celo. Con desenfreno, corren hacia el poder, el dinero, las alianzas con potencias extranjeras y a otros dioses. Los ídolos no buscan a nadie. La gente busca a los ídolos y luego corre con ligereza en pos de ellos. Después se siente tan cómoda en su pecado que no puede pensar en renunciar a él. Su única vergüenza es que la atrapen. Si deseamos algo a tal punto que estamos dispuestos a hacer cualquier cosa para conseguirlo, esta es una señal de que somos adictos a ella y estamos fuera de sintonía con Dios.

2.30 Ser un profeta en esos tiempos implicaba grandes riesgos. Los profetas tenían que criticar las políticas de reyes malvados y esto los hacía parecer traidores. Los reyes odiaban a los profetas por levantarse en contra de sus políticas y, por lo general, el pueblo los odiaba por predicar en contra de sus estilos idólatras de vida. (Véase Act 7:52.)

2.31, 32 El olvido ya sea accidental o intencional puede ser peligroso. Israel se olvidó de Dios al centrar sus afectos en los encantos del mundo. Mientras más nos concentremos en los placeres del mundo, más fácil resultará que nos olvidemos de la protección, el amor, la fiabilidad, la dirección de Dios y, sobre todo, de El mismo. ¿Qué le agrada más? ¿Se ha olvidado de Dios últimamente?
2.36 Dios no está en contra de las alianzas ni de las sociedades de trabajo, sino que está en contra de que la gente confíe en otros para recibir la ayuda que solo debe provenir de El. Este era el problema en los tiempos de Jeremías. Después de los días de David y Salomón, Israel se dividió debido a que los líderes buscaron la ayuda de otras naciones y dioses y no del verdadero Dios. Jugaron políticas de poder, pensando que sus vecinos fuertes los protegerían. Pero Judá pronto aprendería que esta alianza con Egipto sería tan desalentadora como su antigua alianza con Asiria (2Ki 16:8-9; Isa 7:13-25).

REYES QUE VIVIERON DURANTE LA VIDA DE JEREMIAS
Josías - 2 Reyes 22.1--23.30 Reinó del 640-609 a.C. En su mayor parte bueno.
Mensaje entregado: 3.6-25
Joacaz - 2Ki 23:31-332Ki 23:--609 a.C. - Malvado
Mensaje entregado: 22.11-17
Joacim - 2 Reyes 23.34--24.7 - - 609-598 a.C.  -  Malvado
Mensaje entregado: 22.18-23; 25.1-38; 26.1-24; 27.1-11; 35.1-19; 36.1-32
Joaquín  -  2Ki 24:8-172Ki 24:-   598-597 a.C.   -  Malvado
Mensaje entregado: 13.18-27; 22.24-30
Sedequías  -  2 Reyes 24.18--25.26  -  597-586 a.C.  -  Malvado
Mensaje entregado: 21.1-14; 24.8-10; 27.12-22; 32.1-5; 34.1-22; 37.1-21; 38.1-28; 51.59-64


No hay comentarios:

Publicar un comentario

JOB 21

Job afirma que los malos prosperan JOB 21 JES Job 21:1-34 21.1ss Job refutó la idea de Zofar de que los malos nunca tendrán riquezas y felic...