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Continuaré rescatándote de tu pueblo y de los gentiles a quienes te estoy enviando.

Hechos 26:17 (ISV)

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Versos Pensamientos

Saulo de Tarso pensó que era un excelente ejemplo de un hombre de Dios. Tenía confianza en sus propias habilidades y estaba orgulloso de su herencia. Antes de ser salvo por gracia a través de la fe en Cristo, Pablo era un fariseo devoto, que se jactaba de su estándar moral y religiosidad. Incluso consideró que era superior a todos los demás en piedad y cualidades piadosas.

Este hombre era judío y seguía diligentemente todas las costumbres judías y sus muchas tradiciones. Era un israelita, que fue circuncidado en el octavo día, como lo exige la Ley Mosaica. Era un hebreo de los hebreos que provenía de la tribu de Benjamín. Saulo de Tarso era un hombre orgulloso, que sabía que su parentesco y pedigrí eran tenidos en alta estima por otros.

Antes de la salvación que podía presumir, "en cuanto a la Ley. Fariseo. En cuanto al celo ... perseguidor de la iglesia. En cuanto a la justicia, que es en la ley. Intachable." De hecho, altas credenciales para este perseguidor de creyentes. Pero todo eso cambió cuando Saulo de Tarso se encontró con Jesús de Nazaret en el camino a Damasco, y se convirtió en Pablo, el apóstol de Dios a los gentiles.

En Hechos 26 encontramos a Pablo, parado en un tribunal de justicia, defendiendo su fe cristiana. Había sido atacado agresivamente por ciertos judíos que querían matarlo, y en su defensa, Pablo volvió a contar los asombrosos eventos en su viaje de Jerusalén a Damasco. Él contó cómo llevaba una orden de arresto para arrestar a hombres, mujeres y niños cristianos, pero fue detenido en seco por una reunión sobrenatural con el resucitado, ascendido y glorificado Señor Jesucristo, quien lo había elegido del vientre de su madre para ser su apóstol.

Después de relacionar la luz cegadora que lo arrojó a él y a sus compañeros al suelo, Pablo contó las primeras palabras que escuchó de los labios de su Salvador: "Saúl, Saúl, ¿por qué me persigues? Es difícil para ti patear contra los aguijones". Pablo consideró que estaba haciendo la voluntad de Dios, pero este visitante celestial, que preguntó por qué Saúlo lo perseguía, le causó una gran consternación y él respondió con una pregunta: "¿Quién eres, Señor?"

Pablo conocía todas las afirmaciones del cristianismo y lo había considerado propaganda impía. Él entendió que Jesús había sido crucificado y enterrado. La declaración de los cristianos de que "Cristo ha resucitado" lo enfureció. Creía que los discípulos habían robado el cuerpo e inventaron la historia de la resurrección. Sin embargo, fue desafiado a lo más profundo de su ser, cuando escuchó la respuesta a su pregunta: "Yo soy Jesús, a quien estás persiguiendo".

Pablo explicó a la corte que su misión había sido exterminar a los seguidores de Cristo, cuyas enseñanzas estaban en conflicto con su propia perspectiva religiosa estrecha. ¡Pero se dio cuenta de que, contrario a hacer la voluntad de Dios, se oponía activamente al Dios de Abraham, Isaac y Jacob! Al perseguir a los cristianos, estaba en conflicto directo con la voluntad de Dios y perseguía a Cristo, el Hijo de Dios y la Cabeza de la Iglesia.

Y ahora, Pablo se paró ante la corte del rey Agripa, encadenado, relatando su experiencia sobrenatural, en una corte de justicia, a dignatarios gentiles. Luego, Pablo les dijo con valentía la siguiente instrucción de Dios para él en el camino de Damasco: "Continuaré rescatándote de tu pueblo, los judíos y de los gentiles, a quienes te estoy enviando". Pablo estaba de pie bajo custodia gentil e interrogado por algunas de las personas de quienes Dios prometió liberarlo.

Mientras Pablo, con confianza, expresó esas palabras ante el rey Agripa y sus cortesanos gentiles, me pregunto qué pasó por la mente de Pablo. ¡Dios había prometido liberarlo de la situación en la que se encontraba! Me pregunto si una oleada de emoción anticipada pasó por su mente. Dios lo había liberado antes de los judíos y gentiles.

Pablo había recibido 39 latigazos de los judíos. Había sido golpeado con varas por los romanos, apedreado por sus enemigos y enfrentado muchos otros peligros de los cuales Dios lo había rescatado. Había estado en peligro por los ladrones, en peligro por su propia gente, en peligro por los gentiles, en peligro en la ciudad, en el campo abierto, en el mar y en el peligro entre los falsos hermanos.

Pablo había enfrentado muchas otras dificultades, noches de insomnio, hambre y sed ... pero la gracia de Dios siempre fue suficiente, y usó todas las circunstancias en la vida de Pablo para su bien eterno y para la propia gloria de Dios. Cuando nos encontremos en dificultades y peligros, recordemos las preciosas promesas que somos nuestras en Cristo, sabiendo que nada nos puede suceder que Dios no permitirá nuestro mayor bien y que Su gracia siempre es suficiente para rescatarnos de cada situación en la que nos ha colocado, para nuestro beneficio eterno y para su mayor gloria.

Mi oración

Padre celestial, gracias porque enviaste a Jesús para ser nuestro pariente Redentor, y que por fe soy parte de su cuerpo. Ayúdame a vivir de acuerdo a Tu voluntad y no a encontrarme en oposición a Tus planes y propósitos, siguiendo mi propia lógica o deseos. Ayúdame a convertirme en un sabio estudiante de las Escrituras y llevar a cabo Tus propósitos para mi vida, para que pueda ser un testimonio de la verdad. Y rezo para que pueda aprender a considerar que los sufrimientos de este tiempo presente no son dignos de ser comparados con la gloria que será revelada. Esto lo pido en el nombre de Jesús, AMEN.

Hechos 26:17 rescatándote del pueblo judío y de los gentiles, a quienes te estoy enviando,

Hechos 9:15 Pero el Señor le dijo: "Ir por él es un elegido instrumento mío, para llevar mi nombre antes los gentiles y reyes y los hijos de Israel;

Jeremías 1: 8 "No les tengas miedo, por Estoy contigo para librarte”, declara el Señor.

Jeremías 1:19 Lucharán contra ti, pero no te vencerán, porque Estoy contigo para librarte”, declara el Señor.

Romanos 11:13 Pero les estoy hablando a ustedes que son gentiles. Por lo tanto, como Soy un apóstol de gentiles, magnifico mi ministerio,

1 Timoteo 2: 7 Para esto fui designado un predicador y un apóstol Estoy diciendo la verdad, no estoy mintiendo) como maestro de los gentiles en fe y verdad.

1 Crónicas 16:35 Luego di: "Sálvanos, oh Dios de nuestra salvación, Y reúnenos y líbranos de las naciones, para dar gracias a tu santo nombre, y Gloria en tu alabanza.

Salmo 34:19 Muchos son las aflicciones de los justos, Pero el señor lo libera de todos ellos.

Salmo 37: 32-33 32 Acecha el impío al justo, Y procura matarlo.

33 Jehová no lo dejará en sus manos, Ni lo condenará cuando le juzgaren.

Hechos 9: 23-25 Saulo escapa de los judíos

23 Pasados muchos días, los judíos resolvieron en consejo matarle;

24 pero sus asechanzas llegaron a conocimiento de Saulo. Y ellos guardaban las puertas de día y de noche para matarle.

25 Entonces los discípulos, tomándole de noche, le bajaron por el muro, descolgándole en una canasta.

Hechos 9: 29-30 29 y hablaba denodadamente en el nombre del Señor, y disputaba con los griegos; pero éstos procuraban matarle.

30 Cuando supieron esto los hermanos, le llevaron hasta Cesarea, y le enviaron a Tarso.

Hechos 13:50 Pero los judíos incitaron a las mujeres devotas de prominencia y los principales hombres de la ciudad, e instigó una persecución contra Pablo y Bernabé, y los expulsó de su distrito.

Hechos 14: 5-6 5 Pero cuando los judíos y los gentiles, juntamente con sus gobernantes, se lanzaron a afrentarlos y apedrearlos,

6 habiéndolo sabido, huyeron a Listra y Derbe, ciudades de Licaonia, y a toda la región circunvecina,

Hechos 14: 19-20 19 Entonces vinieron unos judíos de Antioquía y de Iconio, que persuadieron a la multitud, y habiendo apedreado a Pablo, le arrastraron fuera de la ciudad, pensando que estaba muerto.

20 Pero rodeándole los discípulos, se levantó y entró en la ciudad; y al día siguiente salió con Bernabé para Derbe.

Hechos 16:39 y vinieron y les llamaron, y cuando los sacaron, les rogaron para salir de la ciudad

Hechos 17:10. Los hermanos enviaron inmediatamente Pablo y Silas se alejan de noche para Berea y cuando llegaron entraron La sinagoga de los judíos.

Hechos 17:14 Entonces inmediatamente los hermanos enviaron a Pablo a ir hasta el mar; y Silas y Timoteo se quedó allí.

Hechos 18:10. porque estoy contigo, y nadie te atacará para hacerte daño, porque tengo mucha gente en esta ciudad.

Hechos 18: 12-16 12 Pero siendo Galión procónsul de Acaya, los judíos se levantaron de común acuerdo contra Pablo, y le llevaron al tribunal,

13 diciendo: Este persuade a los hombres a honrar a Dios contra la ley.

14 Y al comenzar Pablo a hablar, Galión dijo a los judíos: Si fuera algún agravio o algún crimen enorme, oh judíos, conforme a derecho yo os toleraría.

15 Pero si son cuestiones de palabras, y de nombres, y de vuestra ley, vedlo vosotros; porque yo no quiero ser juez de estas cosas.

16 Y los echó del tribunal.

Hechos 19: 28-41 28 Cuando oyeron estas cosas, se llenaron de ira, y gritaron, diciendo: !!Grande es Diana de los efesios!

29 Y la ciudad se llenó de confusión, y a una se lanzaron al teatro, arrebatando a Gayo y a Aristarco, macedonios, compañeros de Pablo.

30 Y queriendo Pablo salir al pueblo, los discípulos no le dejaron.

31 También algunas de las autoridades de Asia, que eran sus amigos, le enviaron recado, rogándole que no se presentase en el teatro.

32 Unos, pues, gritaban una cosa, y otros otra; porque la concurrencia estaba confusa, y los más no sabían por qué se habían reunido.

33 Y sacaron de entre la multitud a Alejandro, empujándole los judíos. Entonces Alejandro, pedido silencio con la mano, quería hablar en su defensa ante el pueblo.

34 Pero cuando le conocieron que era judío, todos a una voz gritaron casi por dos horas: !!Grande es Diana de los efesios!

35 Entonces el escribano, cuando había apaciguado a la multitud, dijo: Varones efesios, ¿y quién es el hombre que no sabe que la ciudad de los efesios es guardiana del templo de la gran diosa Diana, y de la imagen venida de Júpiter?

36 Puesto que esto no puede contradecirse, es necesario que os apacigüéis, y que nada hagáis precipitadamente.

37 Porque habéis traído a estos hombres, sin ser sacrílegos ni blasfemadores de vuestra diosa.

38 Que si Demetrio y los artífices que están con él tienen pleito contra alguno, audiencias se conceden, y procónsules hay; acúsense los unos a los otros.

39 Y si demandáis alguna otra cosa, en legítima asamblea se puede decidir.

40 Porque peligro hay de que seamos acusados de sedición por esto de hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este concurso.

41 Y habiendo dicho esto, despidió la asamblea.

Hechos 21: 28-36 28 dando voces: !!¡Varones israelitas, ayudad! Este es el hombre que por todas partes enseña a todos contra el pueblo, la ley y este lugar; y además de esto, ha metido a griegos en el templo, y ha profanado este santo lugar.

29 Porque antes habían visto con él en la ciudad a Trófimo, de Efeso, a quien pensaban que Pablo había metido en el templo.

30 Así que toda la ciudad se conmovió, y se agolpó el pueblo; y apoderándose de Pablo, le arrastraron fuera del templo, e inmediatamente cerraron las puertas.

31 Y procurando ellos matarle, se le avisó al tribuno de la compañía, que toda la ciudad de Jerusalén estaba alborotada.

32 Este, tomando luego soldados y centuriones, corrió a ellos. Y cuando ellos vieron al tribuno y a los soldados, dejaron de golpear a Pablo.

33 Entonces, llegando el tribuno, le prendió y le mandó atar con dos cadenas, y preguntó quién era y qué había hecho.

34 Pero entre la multitud, unos gritaban una cosa, y otros otra; y como no podía entender nada de cierto a causa del alboroto, le mandó llevar a la fortaleza.

35 Al llegar a las gradas, aconteció que era llevado en peso por los soldados a causa de la violencia de la multitud;

36 porque la muchedumbre del pueblo venía detrás, gritando: !!Muera!

Hechos 22: 21-22 21 Pero me dijo: Ve, porque yo te enviaré lejos a los gentiles. Pablo en manos del tribuno

22 Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a tal hombre, porque no conviene que viva.

Hechos 23: 10-24 10 Y habiendo grande disensión, el tribuno, teniendo temor de que Pablo fuese despedazado por ellos, mandó que bajasen soldados y le arrebatasen de en medio de ellos, y le llevasen a la fortaleza.

11 A la noche siguiente se le presentó el Señor y le dijo: Ten ánimo, Pablo, pues como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma. Complot contra Pablo

12 Venido el día, algunos de los judíos tramaron un complot y se juramentaron bajo maldición, diciendo que no comerían ni beberían hasta que hubiesen dado muerte a Pablo.

13 Eran más de cuarenta los que habían hecho esta conjuración,

14 los cuales fueron a los principales sacerdotes y a los ancianos y dijeron: Nosotros nos hemos juramentado bajo maldición, a no gustar nada hasta que hayamos dado muerte a Pablo.

15 Ahora pues, vosotros, con el concilio, requerid al tribuno que le traiga mañana ante vosotros, como que queréis indagar alguna cosa más cierta acerca de él; y nosotros estaremos listos para matarle antes que llegue.

16 Mas el hijo de la hermana de Pablo, oyendo hablar de la celada, fue y entró en la fortaleza, y dio aviso a Pablo.

17 Pablo, llamando a uno de los centuriones, dijo: Lleva a este joven ante el tribuno, porque tiene cierto aviso que darle.

18 El entonces tomándole, le llevó al tribuno, y dijo: El preso Pablo me llamó y me rogó que trajese ante ti a este joven, que tiene algo que hablarte.

19 El tribuno, tomándole de la mano y retirándose aparte, le preguntó: ¿Qué es lo que tienes que decirme?

20 Él le dijo: Los judíos han convenido en rogarte que mañana lleves a Pablo ante el concilio, como que van a inquirir alguna cosa más cierta acerca de él.

21 Pero tú no les creas; porque más de cuarenta hombres de ellos le acechan, los cuales se han juramentado bajo maldición, a no comer ni beber hasta que le hayan dado muerte; y ahora están listos esperando tu promesa.

22 Entonces el tribuno despidió al joven, mandándole que a nadie dijese que le había dado aviso de esto. Pablo es enviado a Félix el gobernador

23 Y llamando a dos centuriones, mandó que preparasen para la hora tercera de la noche doscientos soldados, setenta jinetes y doscientos lanceros, para que fuesen hasta Cesarea;

24 y que preparasen cabalgaduras en que poniendo a Pablo, le llevasen en salvo a Félix el gobernador.

Hechos 25: 3 solicitando una concesión contra Paul, para que él pueda que lo traigan a Jerusalén (al mismo tiempo, establecer una emboscada para matarlo en el camino).

Hechos 25: 9-11 9 Pero Festo, queriendo congraciarse con los judíos, respondiendo a Pablo dijo: ¿Quieres subir a Jerusalén, y allá ser juzgado de estas cosas delante de mí?

10 Pablo dijo: Ante el tribunal de César estoy, donde debo ser juzgado. A los judíos no les he hecho ningún agravio, como tú sabes muy bien.

11 Porque si algún agravio, o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehúso morir; pero si nada hay de las cosas de que éstos me acusan, nadie puede entregarme a ellos. A César apelo.

Hechos 27: 42-44 42 Entonces los soldados acordaron matar a los presos, para que ninguno se fugase nadando.

43 Pero el centurión, queriendo salvar a Pablo, les impidió este intento, y mandó que los que pudiesen nadar se echasen los primeros, y saliesen a tierra;

44 y los demás, parte en tablas, parte en cosas de la nave. Y así aconteció que todos se salvaron saliendo a tierra.

Hechos 28:28 Por lo tanto, que sepas que esta salvación de Dios ha sido enviada a los gentiles; ellos también escucharán ".

Romanos 15:16 ser - estar un ministro de Cristo Jesús a los gentiles, ministrando como sacerdote el evangelio de Dios, para que mi La ofrenda de los gentiles puede ser aceptable, santificada por el Espíritu Santo.

2 Corintios 1: 8-10 8 Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida.

9 Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos;

10 el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte;

2 Corintios 4: 8-10 8 que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados;

9 perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos;

10 llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.

2 Corintios 11: 23-26 23 ¿Son ministros de Cristo? (Como si estuviera loco hablo.) Yo más; en trabajos más abundante; en azotes sin número; en cárceles más; en peligros de muerte muchas veces.

24 De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno.

25 Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar;

26 en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos;

Gálatas 2: 9 y reconociendo la gracia que me habían dado James y Cephas y John, que eran con fama de ser pilares, me dieron y Bernabé el Derecha mano de compañerismo, para que podamos ve a los gentiles y ellos a los circuncisos.

Efesios 3: 7-8 7 del cual yo fui hecho ministro por el don de la gracia de Dios que me ha sido dado según la operación de su poder.

8 A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo,

2 Timoteo 1:11 para lo cual fui nombrado predicador y apóstol y maestro.

2 Timoteo 3:11 persecuciones, y sufrimientos, como me sucedió en Antioquia, en Iconium y en Listra; qué persecuciones que soporté, y de todas ¡el Señor me rescató!

2 Timoteo 4: 16-17 16 En mi primera defensa ninguno estuvo a mi lado, sino que todos me desampararon; no les sea tomado en cuenta.

17 Pero el Señor estuvo a mi lado, y me dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, y que todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león.

Source: https://bible.knowing-jesus.com/Acts/26/17/cross-references

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