miércoles, 16 de noviembre de 2022

JOB 21

  • Job afirma que los malos prosperan


JOB 21


JES


Job 21:1-34

21.1ss Job refutó la idea de Zofar de que los malos nunca tendrán riquezas y felicidad, diciendo que en el mundo real el malvado sí prospera. Dios hace lo que le place con los individuos (21.22-25), y la gente no puede emplear sus circunstancias para medir su propia bondad o la de Dios, algunas veces (pero no siempre) están relacionadas. El éxito de los amigos de Job estaba basado en su realización exterior. Sin embargo, el éxito para Dios está en el corazón de las personas.

21.22 A pesar de estar confundido por las razones de su sufrimiento, Job afirmó la superioridad de la sabiduría de Dios al preguntar: "¿Enseñará alguien a Dios sabiduría?" La manera en que usted responde a sus luchas personales indica su actitud hacia Dios. En vez de enojarse con Dios, continúe confiando en El, sin importar cuáles sean sus circunstancias. Aun cuando parezca muy difícil de creer, Dios está en control. Debemos comprometernos con El y así no nos resentiremos por el tiempo en que El actúe.

21.29-33 Si la gente mala se enriquece a pesar de su pecado, ¿por qué debemos tratar de ser buenos? Puede parecer que los malos pequen y no les pase nada, pero hay un Juez superior y un juicio futuro (Rev_20:11-15). El establecimiento final de la justicia no vendrá en esta vida, sino en el más allá. Lo más importante es cómo una persona ve a Dios a través de la prosperidad o la pobreza, y no la pobreza o la prosperidad en sí mismas.


martes, 15 de noviembre de 2022

JOB 20

  • Zofar describe las calamidades de los malos


JOB 20




20.1ss El discurso de Zofar reveló una vez más su falsa conjetura al basar su argumento exclusivamente en la idea de que Job era un hipócrita malvado. Zofar dijo que aunque Job había estado bien por un tiempo, no había vivido una vida recta, por lo tanto Dios le había arrebatado su riqueza. De acuerdo con Zofar, las calamidades de Job probaban su maldad.

20.6, 7 A pesar de que Zofar estaba equivocado al dirigir su perorata contra Job, tenía razón al hablar del final de las personas malas. Al principio, el pecado parece atractivo y se disfruta. Mentir, robar u oprimir a otros a menudo trae un beneficio temporal para aquellos que practican estos pecados. Algunos incluso viven largas vidas con un beneficio mal habido. Pero al final, la justicia de Dios prevalecerá. Lo que Zofar no pudo ver es que el juicio por esos pecados quizá no venga durante la vida de un pecador. El castigo puede ser aplazado hasta el juicio final, cuando los pecadores serán cortados de la presencia de Dios. No debemos impresionarnos por el éxito y el poder de la gente perversa. El juicio de Dios sobre ellos es seguro.


JOB 19

  • Job confía en que Dios lo justificará


JOB 19




19.3-5 Es muy fácil señalar los defectos o los pecados de alguien. Los amigos de Job lo acusaron de pecador para hacerlo sentir culpable, no para alentarlo ni corregirlo. Si sentimos que debemos reprender a alguien, debemos asegurarnos de que estamos confrontando a esa persona porque la amamos, no porque estemos enojados, incomodados o porque estemos buscando culparlo.

19.6 Job sintió que Dios estaba tratándolo como un enemigo cuando, en realidad, Dios era su amigo y lo tenía en alta estima (1.8; 2.3). En medio de la dificultad, Job señaló a la persona equivocada. Era Satanás, no Dios, el enemigo de Job. Debido a que los israelitas ponían mucho énfasis en la causa final de las cosas, creían que tanto el bien como el mal provenían de Dios. También pensaban que la gente era responsable por sus propios destinos. Sin embargo, el poder maligno que anda suelto en este mundo es el culpable de mucho del sufrimiento que experimentamos. En el versículo 7, Job continúa clamando para que Dios lo escuche.

19.25-27 En el corazón mismo del libro de Job surge su afirmación resonante de confianza: "Yo sé que mi Redentor vive". En el antiguo Israel un redentor era un miembro de la familia que liberaba a un esclavo o que se hacía cargo de una viuda (véase la nota a Rth 3:1). Qué tremenda fe tenía Job, especialmente a la luz del hecho de que no estaba consciente de la conferencia que habían tenido Dios y Satanás. Job pensaba que Dios era el causante de todos esos desastres que habían caído sobre él. De cara a la muerte y a la decadencia, Job seguía esperando ver a Dios, y lo esperaba mientras estuviera en su cuerpo. Cuando el libro de Job fue escrito, Israel no tenía una doctrina bien desarrollada de la resurrección. A pesar de que Job luchó con la idea de que Dios estaba en contra de él en ese momento, creía firmemente que al final Dios estaría de su lado. Esta creencia era tan fuerte que Job llegó a ser el primero que habló acerca de la resurrección del cuerpo (véase también Psa 16:10; Isa 26:19; Dan 12:2, Dan 12:13).

19.26 Job dijo: "En mi carne he de ver a Dios". En la situación que se encontraba, parecía imposible para él que pudiera ver a Dios en su carne. ¡Y esta es la clave de la fe de Job! Tenía la confianza de que la justicia de Dios triunfaría, aun cuando para lograrlo se requiriera de un milagro como la resurrección.


lunes, 14 de noviembre de 2022

JOB 18

  • Bildad describe la suerte de los malos


JOB 18




18.1ss Bildad pensó que sabía cómo debía gobernarse el universo y vio la vida de Job como una ilustración de las consecuencias del pecado. Rechazó la parte de la historia correspondiente a Job porque no encajaba en su punto de vista acerca de la vida. Es fácil condenar a Bildad ya que sus errores son obvios; desafortunadamente, sin embargo, a menudo nosotros reaccionamos de la misma manera cuando nuestras ideas se ven amenazadas.

18.14 El "rey de los espantos" es una figura del discurso que se refiere a la muerte. Bildad veía a la muerte como un gran devorador (18.13), pero la Biblia nos enseña que Dios tiene el poder de devorar incluso a la muerte (Psa 49:15; Isa 25:8; 1Co 15:54-56).


JOB 17

 JOB 17





17.10 Los tres amigos de Job tenían la reputación de ser sabios, pero Job no pudo encontrar sabiduría en ninguno de ellos. Dios respaldó la afirmación de Job en 42.7, condenando a estos hombres por la descripción falsa que hicieron de El. Obviamente estos hombres tenían una visión defectuosa de la sabiduría. Asumían que porque eran prósperos y exitosos, Dios debía estar complacido con la forma en que vivían y pensaban. Job, sin embargo, les dijo que estaban comenzando con una idea equivocada porque los éxitos y la prosperidad terrenales no son prueba de la fe en Dios. De la misma manera que los problemas y las aflicciones no prueban la infidelidad. El hombre verdaderamente sabio sabe que la sabiduría proviene solo de Dios, no de los éxitos o fracasos humanos. El hombre verdaderamente sabio nunca abandona a Dios. La sabiduría de Dios prueba ser superior a la de Job y todos sus amigos.

17.15 Job renunció a la esperanza de una restauración futura de su riqueza y de su familia, y se encerró en pensamientos de muerte y en el descanso prometido de la pena y el dolor. Las recompensas de las que hablaban los amigos de Job estaban todas relacionadas con la vida presente. Guardaron silencio acerca de la posibilidad de la vida después de la muerte. No debemos evaluar la vida solo en términos del mundo presente, ya que Dios promete un futuro maravilloso y eterno para aquellos que son fieles a El.


JOB 16

  • Job se queja contra Dios


JOB 16





16.1ss Se suponía que los amigos de Job debían consolarlo en su dolor. En cambio, lo condenaron por haber propiciado su propio sufrimiento. Job comenzó su réplica a Elifaz al llamarlo a él y a sus amigos "consoladores molestos". Las palabras de Job revelan varias maneras para llegar a ser un mejor consolador para aquellos que sufren: (1) no hable sólo por hablar, (2) no dé sermones al dar respuestas amables, (3) no acuse ni critique, (4) póngase en el lugar de la otra persona y (5) ofrezca ayuda y aliento. Pruebe las sugerencias de Job, con el conocimiento de que fueron dadas por una persona que necesitaba un gran consuelo. Los que pueden consolar mejor son aquellos que saben algo acerca del sufrimiento personal.

16.19 Job tenía miedo de que Dios lo hubiese abandonado. Aun así, apeló directamente a Dios (su testigo) ya que Dios conocía su inocencia. Un testigo es aquel que ha visto lo que sucedió, y mi testimonio es como un abogado que habla a nombre del querellante. Al usar estos términos, Job mostró que él había depositado en el Dios de los cielos toda su esperanza de una defensa justa, porque probablemente moriría antes de que sucediera en la tierra. En el Nuevo Testamento aprendemos que Jesucristo intercede a nuestro favor (Heb 7:25, 1Jo 2:1), por lo tanto, no tenemos nada que temer.


martes, 8 de noviembre de 2022

JOB 15

  • Elifaz reprende a Job


JOB 15




15.1ss Una vez concluida la primera ronda de discusión, cada uno de los amigos de Job, en el mismo orden, insistió en sus argumentos. De nuevo Job replicó a cada uno de ellos (capítulos 15-31). Esta vez, Elifaz fue más rudo, más vehemente y más amenazador, pero no dijo nada nuevo. (Véase su primer discurso en capítulos 4, 5.) Comenzó diciendo que las palabras de Job eran vacías e inútiles. Luego reafirmó su opinión de que Job debía ser un gran pecador. De acuerdo con Elifaz, la experiencia y la sabiduría de sus antepasados tenían más valor que los pensamientos individuales de Job. Elifaz creyó que sus palabras eran tan ciertas como las de Dios. No es difícil descubrir su arrogancia.

15.15, 16 "Ni aun los cielos son limpios delante de sus ojos". Elifaz estaba repitiendo su argumento de que ninguna cosa creada, sean ángeles (los santos) u hombre, es base suficiente de confianza y esperanza. Solo en Dios podemos estar seguros. (Véase la nota a 4.18, 19.)


JOB 21

Job afirma que los malos prosperan JOB 21 JES Job 21:1-34 21.1ss Job refutó la idea de Zofar de que los malos nunca tendrán riquezas y felic...